
En los últimos años hemos visto una revolución en los laboratorios de embriología, mejorando técnicas (como la vitrificación), microscopios de gran aumento…. y como no, también los incubadores.
El incubador es el lugar donde los embriones crecen «in vitro». Dicho desarrollo embrionario se consigue manteniendo niveles de temperatura y CO2 óptimos y estables.
Hasta hace unos años, el nivel de concentración de oxígeno en los incubadores era el atmosférico (20%), pero de un tiempo a esta parte, los nuevos incubadores aportan bajas concentraciones de oxígeno (5%) ya que se ha demostrado que en estas condiciones se mejora el cultivo embrionario (sobretodo el cultivo de los blastocistos).
Seguramente, muchos de vosotros habréis oído hablar de una nueva generación de incubadores. Son aquellos que integran la tecnología Timelapse. ¿ Y qué es el timelapse? Pues es la posibilidad de hacer fotos de los embriones en intervalos cortos de tiempo, dando como resultado un vídeo (fotograma a fotograma) en el que se puede ver el desarrollo embrionario desde su inicio.
Estos incubadores (los hay de diferentes marcas, quizás la más conocida sea Embryoscope) tienen las mismas características que los actuales incubadores, pero añaden la posibilidad de tener este vídeo para cada uno de los embriones incubados.
Estas imágenes pueden servir de apoyo a los biólogos en el momento de la selección embrionaria, ya que permiten ver momentos del desarrollo embrionario sobre los que antes no tenían información. Aún así, a día de hoy es sólo eso, un apoyo. Sigue siendo el biólogo quien, en función de las imágenes, toma la decisión de transferir uno u otro embrión.
Conociendo esto, ¿son imprescindibles estos incubadores de última generación? Si bien es cierto que el hecho de hacer esas fotografías permite obtener información de los embriones sin necesidad de moverlos, como incubador tiene las mismas prestaciones que otros modernos.
Eso sí, tengo que reconocer que los vídeos son una chulada….

Con la llegada de las vacaciones, muchas pacientes se plantean si es mejor aprovechar esos días de descanso para hacer el tratamiento de FIV. Nuestra recomendación para las pacientes que no se han de desplazar para someterse a la FIV (esto es, que el centro escogido está cerca de su lugar de residencia) es clara: no vale la pena utilizar el periodo vacacional para realizar todo el proceso.
En muchos aspectos de nuestra vida, nos damos cuenta de que dos y dos no siempre son cuatro. En Reproducción Asistida esto es una realidad. Cada paciente es diferente, y cada ciclo también. Así que no debemos extrapolar resultados. Para que el tratamiento funcione, debemos ser capaces de crear un traje a medida para esa paciente en concreto. Eso es seguramente lo que más me gusta de la Reproducción. Si bien es cierto que esto no siempre es posible.



Cuando alguien necesita de un centro de Reproducción Asisitida para que le ayude a conseguir un embarazo, empiezan a aparecer las primeras preguntas: ¿Dónde voy, al que me ha recomendado un conocido o a ese que tiene tanta fama y veo en los medios de comunicación? ¿Me van a ofrecer todos lo mismo?

Web del CIRH:
anacer: Asociación Nacional de Clínicas de Reproducción Asistida